10 de febrero de 2015

Javier Aguirre: jugamos al fútbol "con el objetivo de evangelizar y que se conozcan los jóvenes católicos de la zona"

Tiene nombre de entrenador de fútbol, pero no. Este Javier Aguirre es un joven de 24 años de la parroquia de Santo Tomás Moro, en Majadahonda, y ha llegado aún más lejos. La Clericus Cup, el torneo de fútbol que se celebra en Roma entre congregaciones, le inspiró a hacer algo parecido, pero en donde vive, con su parroquia y con las parroquias de alrededor. Así nació la “Copa Católica de fútbol” de las Parroquias del Noroeste de Madrid, en la que participan jóvenes católicos de entre 16 y 35 años. El Regnum Christi, aunque no tiene equipo jugando en la liga, sí ha prestado las instalaciones del K2, el Club de chicos del ECyD que hay junto a Cerro del Coto, la casa de las consagradas. Javier ha explicado a LomásRC algunos de los entresijos de este campeonato que incluso tiene su propia página web (http://www.copacatolica.com/) desde donde dan seguimiento a los partidos, informan de los horarios, los goleadores…

¿Cómo surgió esta iniciativa y por qué?

Surgió tras ver un partido de la famosa Clericus Cup, que es un mundial de fútbol que juegan sacerdotes y seminaristas en el Vaticano. Se nos ocurrió que podríamos realizar una competición parecida entre parroquias, con el objetivo de evangelizar y que se conocieran los jóvenes católicos de la zona.

¿Es sólo para parroquias o pueden participar otros grupos?
La mayoría de los participantes son parroquias, pero estamos abiertos a que participen otros grupos. Participan con nosotros la Hermandad de Los Gitanos de Madrid y varios frailes agustinos recoletos que viven en la casa de Formación de Las Rozas. Nuestra idea es que también puedan participar hermandades, movimientos, órdenes religiosas, etc... ya que todos somos Iglesia Católica.

¿Cuál ha sido la reacción de los párrocos?
En un primer momento costó convencer a la mayoría, pero una vez presentamos la idea en la mesa de la juventud de nuestro arciprestazgo todo fue cuesta abajo. Actualmente contamos con el apoyo de todos y les parece una gran iniciativa.

¿Y de los jóvenes?
Los jóvenes fueron los que apostaron fuerte desde un primer momento por la idea, ya que a la mayoría de nosotros nos encanta hacer deporte, y el fútbol es el deporte favorito de muchos. Al final se trata de poner nuestro talento al servicio del Señor.

¿Qué es lo que se lleva el ganador?
Al final del torneo se realiza una misa, con un ofrecimiento de la copa del campeón a la Virgen. La Virgen María ha sido desde un primer momento nuestra protectora y está presente en nuestro logo. El mejor premio es pasarlo bien, conocer gente, evangelizar y hacer amigos. En las actividades del arciprestazgo o de la Delegación de Juventud del Arzobispado (Deleju) luego hay muy buen rollo, con piques sanos entre los jóvenes y sacerdotes de las parroquias.

En el torneo de invierno 2014 ganó la parroquia de Santa Genoveva Torres Morales, de Majadahonda (el equipo de la imagen superior).

¿Hay alguna liga superior a la que concurrir?
De momento no hay liga superior o inferior pero de cara al futuro estamos pensando hacer una liga para gente más joven.

Los partidos los habéis jugado en el K2, un club del ECyD, y la misa de inauguración y de clausura la celebrasteis en la casa de las Consagradas del Regnum Christi. ¿Cómo os habéis sentido?
Desde el primer momento hemos tenido todo el apoyo del Club deportivo cultural K2, de Majadahonda. Su presidente, Fernando Sánchez Gil, siempre nos ha acompañado desde el principio y es una bendición tenerle junto a nosotros. Los campos se encuentran junto a la casa de las Consagradas del Regnum Christi, que siempre que vamos nos acogen estupendamente. Tenemos mucha suerte porque todo nos ha venido del cielo.

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